Declaraciones de los Metrodelegados ante la transferencia de subterráneos
Declaraciones de los Metrodelegados ante la transferencia de subterráneos
27.12.2012
En declaraciones a los medios, los metrodelegados de la Asociación Gremial de Trabajadores de Subterráneos y Premetro (AGTSyP), Roberto Pianelli, y el secretario de prensa, Quique Rositto, afirmaron que les “preocupa el asesoramiento erróneo que está teniendo el Jefe de gobierno para tomar este tipo de decisiones”.
El pasado lunes 24 trascendió que el gobierno porteño tenía la intención de cerrar por tres meses la línea A del subte para hacer reparaciones. Frente a esto, los metrodelegados sostienen que “las vías, el sistema eléctrico y las usinas ya han sido renovadas y los informes que tenemos nosotros es que con un máximo de 72 horas toda la flota podría estar instalada y en máximo de cuatro días, toda la línea podría estar funcionando”. Así lo señaló el secretario de prensa, Quique Rositto, en declaraciones a los medios realizadas ayer en el marco de una reunión entre el frente de izquierda griega Syriza y la CTA, a la que también asistió el secretario general de la Asociación.
Rositto agregó también que el anuncio “debería haber sido acompañado de un plan de contingencia, es decir, de anuncios sobre cuáles serían los servicios terrestres que iba a ofrecer la Ciudad como alternativa para los más de 200.000 usuarios del subterráneo, que van a trasladarse en colectivo y vehículos particulares”. “Los usuarios son los primeros impactados con esta decisión”, sostuvo el metrodelegado.
“Nos resultó sorprendente la decisión abrupta del Jefe de Gobierno de cerrar una línea de subte, primero dijo por tres meses, ahora por dos, sobre todo cuando hace poco más de una semana decía que el servicio era esencial y que no podía ser interrumpido, ni siquiera por una medida de fuerza de los trabajadores. Nos llama la atención la improvisación del plan en la línea A”, señaló Rositto.
La iniciativa impulsada por Mauricio Macri busca suspender el servicio de la Línea A del subte -que va de las estaciones Plaza de Mayo a Carabobo, en Flores- durante un plazo que podría alcanzar los 60 días, con el fin de cambiar los antiguos coches, distintivos de la Línea, por unos nuevos de origen chino, comprados por el gobierno nacional. También buscan modificar el voltaje con el que funciona el recorrido y para concretar esos cambios, que según los trabajadores del Subte no tomaría más que cinco días en total, el gobierno porteño cerrará el servicio durante dos meses.