22.3.2016
Los datos corresponden a un exhaustivo relevamiento realizado por el Instituto de Estudios de Consumo Masivo (INDECOM) sobre las fluctuaciones de precios al consumidor y volúmenes de ventas durante el último cuatrimestre. El informe destaca que los productos que más aumentaron sus precios, encabezados por lácteos, panificados y carnes, fueron, en general, los que menos se consumieron. También se informaron cambios notorios en los hábitos de consumo.
Miguel Ángel Calvete, Presidente del organismo de estadísticas explicó que el trabajo de campo se realizó desde el 1 de noviembre de 2015 hasta el 29 de febrero de 2016 inclusive, evaluando el movimiento de precios y los volúmenes de venta de 253 productos de la canasta básica, incluyendo alimentos, bebidas, higiene personal y artículos de limpieza.
Además reveló que la medición se llevó a cabo sobre un total de 653 puntos de venta, incluyendo 249 Almacenes, 204 autoservicios chinos, 104 sucursales de grandes cadenas de supermercados y 96 ventanas (bocas de expendio de villas y asentamientos), en el ámbito geográfico de la Ciudad de Bs As, Gran Buenos Aires, Rosario, Mar del Plata, Paraná, Córdoba Capital, San Miguel de Tucumán, San Fernando del Valle de Catamarca, Salta Capital, Mendoza y Neuquén.
INDECOM detalló que la leche fluida en sachet por un litro fue el producto que más aumentó su precio en góndola, alcanzando una suba promedio de un 38,2 % y una baja en las ventas del 2,1 %. En tanto, los panificados tipo facturas fueron los productos que más bajaron en sus ventas, registrando una caída del 23,4 %, relacionada directamente con una suba en sus precios del 27,8 %.
Además, el estudio enumeró que el Pan tipo Felipe (8 piezas) que trepó en un 36 % disminuyó su consumo en un 13 %. En este punto, el sondeo aclaró que en el sector de panaderías existe casi un 50% de informalidad, siendo esta medición, realizada en panaderías formalizadas, y con colaboración del Centro de industriales panaderos
Por su parte, los yogures que registraron un alza promedio del 35,4%, bajaron sus ventas entre un 4 y un 11 %, según marca y calidad.
En cuanto a los cortes de carne, que subieron hasta un 34 %, dependiendo de la zona geográfica (CABA 34 %, GBA 30,6 %, Interior 32,4%), las mermas en las ventas fueron de entre el 9 y el 11 % en CABA, de entre el 13 y el 16,2 % en GBA y del 17 al 21,4 en el interior del país.
En este punto, el informe destaca que si se analizan los cortes cárnicos de manera individual, se observa un claro cambio en los hábitos de consumo, demostrando, por ejemplo, que los compradores reemplazaron el Peceto por Falda, la Milanesa de Peceto o Bola de lomo por Cuadrada. También se observó una mayor venta de Churrasco de Paleta, en detrimento de Bifes con Hueso, y que se duplicó el consumo de Carne Picada.
A su vez, los polvos de lavar la ropa aumentaron los precios en un 32,4 % y bajaron sus ventas en un 18,3 %, mientras que otros productos de higiene personal como jabones de tocador y desodorantes que incrementaron sus valores en un 29,7 %, cayeron en su consumo en un 16 %.
Apenas por debajo aparecen los quesos, en todas sus formas, que mostraron una suba de precios del 29,3 %, al igual que los fideos secos que se comercializaron por arriba del 28,7 %. En ambos rubros las caídas en las ventas rondaron el 14 %.
En tanto, el informe detalla que los detergentes subieron un 28 % y perdieron ventas por un 11 %, a la vez que las harinas se fueron para arriba en un 27,2 % y mermaron sus ventas en un 2,3 %.
Un escalón apenas abajo aparecen los productos tomatados, con alzas del 24,5 % en sus costos y con bajas en su consumo del 2,8 %.
Por último, aparecen las galletitas en todas sus variedades que alcanzaron subas de precios de un 17, 4 % y caídas en las ventas del 6,8 %.
Calvete explicó que “el informe también sacó a la luz la cadena de responsabilidades que causaron esas subas durante los últimos 120 días”. En ese sentido, destacó que “los incrementos fueron generados en un 32.5 % desde el ámbito industrial y en un 67,5 % por la especulación de los diferentes canales de comercialización”.
Finalmente, el titular de INDECOM reiteró que “la especulación de muchos sectores ante el cambio de gobierno y el posterior sinceramiento de la economía dispararon los índices y obligaron a los consumidores a disminuir sus compras o a modificar sus hábitos”