Autismo: discriminación temprana y patologización en Buenos Aires
6.1.2018
Pablo Minini
Psicólogo. Delegado de la Asociación de Profesionales de la Salud de Lomas de Zamora
Rodríguez Larreta pretende implementar en el nivel inicial cuestionarios de detección temprana de Trastornos del Espectro Autista. Habla Beatriz Janín, psicoanalista y presidente de Forum Infancias.
Forum Infancias alertó en estos días acerca del proyecto del GCBA de implementar el uso de cuestionarios de detección temprana de Trastornos del Espectro Autista (TEA). ¿Qué son el M-CHAT y el ASQ 3?
Son cuestionarios que buscan trastornos. Nos oponemos a la utilización de todo este tipo de cuestionarios en las escuelas. Porque pensamos que la escuela es un espacio en el cual lo importante es abrir posibilidades a un niño, no cerrárselas. Y por otro lado no es un lugar de detección de trastornos ni de patologías. Sí de dificultades, donde más bien esas dificultades se pongan en movimiento. Donde la cuestión sea cómo ayudar a un niño a desplegar potencialidades.
Es imposible diagnosticar con un cuestionario, porque ni los padres ni los maestros van a ser objetivos. Se confunde la idea de pensar un ser humano con la idea de una máquina. Los padres no son objetivos porque son vínculos en los cuales se juegan los afectos.
Uno ve al otro de acuerdo a las propias posibilidades y lo que espera del otro. Entonces se pretende que los padres vean las conductas de sus hijos como si un niño se tratara un objeto de laboratorio. Esto es grave y modifica el vínculo padres e hijos.
Por otro lado, cuando se les da a los padres un cuestionario es como si se pusiese al niño en sospecha. Es suponer que hay muchísimos niños que pueden tener diagnóstico de autismo y que no son bien detectados. Esto no es así. Más bien lo que se está haciendo es un sobrediagnóstico de Trastorno del Espectro Autista, con lo cual esto agravaría notablemente la situación.
Se ha dicho que evaluar a un niño por sus conductas implica una suerte de reduccionismo, porque se centra en lo biológico y deja de lado otras cuestiones que inciden en el aprendizaje. ¿Esto es así con estos cuestionarios?
Se piensa que todas las conductas infantiles que aparecen como disonantes son conductas cuya determinación es del orden de lo neurológico. Lo que se piensa es que la causa es biológica e inmodificable. En todo caso, si fuera así, lo único que se podría hacer sería adaptar a un niño para que responda “correctamente”. Con esto se está borrando la infancia y sus diferencias. Lo que se hace es intentar forzar a todos los niños a funcionar del mismo modo.
Por otro lado, la ley de SM opera en un sentido opuesto a este, considerando que no se puede dar por supuesto que todos los avatares de la vida que llevan a diferentes conductas humanas y a diferentes tipos de sufrimiento tengan como determinación la neurobiología. Esto es como un posicionamiento que conviene a visiones que intentan borrar las determinaciones históricas y sociales del sufrimiento humano. Esto muy claramente aparece en la infancia, porque los niños están absolutamente marcados por la sociedad en la que viven.
En el comunicado de Forum Infancias sobre estos cuestionarios, ustedes afirman que el diagnóstico neurobiológico se imbrica en el intento de privatización escolar y el ataque a la ley de Salud Mental.
La ley de Salud Mental busca no estigmatizar. Y acá, con este tipo de sondeos peligrosos, se encierra a los niños en diagnósticos. Que es otro modo de controlar al otro. Un modo de armar otro tipo de manicomios. De armar situaciones a alguien se le predice la vida, que va a ser siempre así, porque son diagnósticos de raíz biológica de por vida. Una cosa es detectar dificultades tempranamente y otra es colgar carteles. La educación inicial no puede hacer diagnósticos ni distribuir elementos diagnósticos, porque un cuestionario no puede definir a una persona. Sí puede detectar una dificultad, que es algo que se puede resolver, no es para siempre.
Vos mencionás que este cuestionario no puede verse por fuera de la pretendida reforma laboral y el plan maestro. Comentanos un poco más.
Estos cuestionarios son de por sí una medida que a lo único que puede llevar es a desviar los recursos para mejorar las escuelas y la educación hacia algo que va a terminar yendo en contra de los niños y sus padres. Además, esto se conjuga con un momento en el cual se quiere dejar afuera a los docentes de toda reforma educativa. No se les pregunta a los verdaderos actores qué es lo que les ocurre, qué quisieran modificar, qué no funciona. Sino que se intenta hacer sin ellos. Se implementan planes que van a implicar un desvío del dinero que hay. Todo con una concepción de un niño que tiene que funcionar como máquina.
El neoliberalismo supone personas que funcionen como engranajes de una máquina donde los beneficios los tienen otros. Los niños también tienen que estar formateados para ser futuros productores y consumidores. Se los puede adecuar con técnicas conductistas, se los puede medicalizar para que sean sumisos, controlados desde afuera.
El diagnóstico neurobiológico se imbrica con los intentos privatizadores justamente porque cuando se plantea que la causa es de ese orden lo que se supone es que hay que contratar un acompañante terapéutico, alguien externo a la dinámica de la escuela, que son onerosos. Esto determina que los padres saquen el certificado de discapacidad para que el chico pueda acceder a esto. A lo que lleva es a una proliferación de grupos privados que terminan invadiendo las escuelas, no por los acompañantes mismos. Esto desconoce la importancia de lo que es una verdadera inclusión de un niño que puede tener dificultades en un grado, pero donde el grupo es fundamental en la inclusión. Esto supone un gasto increíble. Posiblemente ya no sea lo público lo que lo albergue, sino los lugares privados.
En 2017 se aprobó la ley DEA, impulsada por la senadora Leguizamón del FpV. Esto fue una clara paradoja, porque se sanciona una ley que pretende ampliar derechos, pero discriminando a esos sujetos de derechos con una clasificación psicopatológica. ¿Ves algún vínculo entre esa ley y estos cuestionarios?
Ya empezamos a tener problemas con la primera ley por patologías, la ley de Trastornos del Espectro Autista, sancionada en 2014. Ya esto marcó una situación donde se incrementó la cantidad de chicos con diagnóstico de TEA. Con la ley de Dificultades Específicas del Aprendizaje también hay una confusión. Porque el aprendizaje es una cuestión compleja, no es simplemente una cuestión específica.
Uno no tiene un chip con el que aprende. Uno aprende toda la vida y el aprendizaje escolar es sólo una parte de todo el aprendizaje. Hablar de dificultades específicas de aprendizaje, suponiendo además que estas son efecto de un problema biológico, es una especie de desconocimiento de la complejidad de la conducta humana.