Una semana de protestas contra las torres de lujo en CABA
30.11.2021
Por Santiago Brunetto
Asambleas Barriales de la Ciudad de Buenos Aires iniciaron este lunes una serie de actividades «de resistencia verde» al tratamiento en la Legislatura porteña de un paquete de leyes vinculadas con la privatización de tierras públicas para emprendimientos inmobiliarios, tales como la habilitación de edificios de lujo en Costa Salguero.
Con una protesta frente al predio de Costa Salguero, las organizaciones socio-ambientales y las asambleas barriales de la Ciudad iniciaron este lunes la «Semana de la Resistencia Verde«, de cara al tratamiento en la Legislatura de la ley de rezonificación de Costa Salguero, el barrio de lujo del Grupo IRSA en Costanera Sur y once torres más a construir en ocho barrios de Buenos Aires. Las organizaciones convocan a marchar a la Legislatura el jueves, cuando el oficialismo porteño buscará aprobar el paquete impulsado por Horacio Rodríguez Larreta. En tanto, durante la semana habrá una sentada a las puertas del edificio de IRSA, bicicleteadas, festivales y semaforazos.
La semana de protestas empezó ante el predio que se volvió un símbolo de la participación ciudadana porteña. Con bengalas y banderas verdes, frente al ingreso a Costa Salguero las organizaciones mostraron un cartel que exigía una «Costanera verde». «La votación de estos proyectos implicará la pérdida definitiva de amplios sectores de la costanera en manos de la especulación inmobiliaria y la destrucción de la planificación de la ciudad transformada en una acumulación de excepciones para quienes tienen dinero para comprar norma urbanística«, dijo a este diario Jonatan Baldiviezo, titular del Observatorio del Derecho a la Ciudad (ODC), la organización que presentó el amparo que derivó en la declaración de inconstitucionalidad de la otra ley que atañe a Costa Salguero y Punta Carrasco, la ley que habilitó al GCBA a enajenar sus 32 hectáreas.
Con esa ley frenada, lo que el oficialismo buscará aprobar es la rezonificación para permitir que sobre la costanera se construyan diez bloques de edificios. El viernes pasado, en un solo plenario de comisiones, Vamos Juntos (VJ) despachó la segunda lectura de la ley de rezonificación. Con las más de dos mil expresiones en contra de la privatización de los dos meses de audiencia pública, el GCBA solo introdujo algunos pocos cambios: se incrementa apenas un tres por ciento para espacio público, las alturas máximas bajan de 32 a 24 metros y se establece un camino de ribera de 50 metros de ancho. En cuanto al proyecto «Costa Urbana» de IRSA, pese a los más de 800 rechazos a las torres de hasta 145 metros, el oficialismo no introdujo cambios al proyecto ingresado a comisiones.
La ingeniera María Eva Koutsovitis, coordinadora de la Cátedra Libre de Ingeniería Comunitaria (CLIC), hizo foco en las inundaciones de este domingo en la ciudad, y señaló el impacto que podrían tener los emprendimientos en la costanera: “Las inundaciones ponen en evidencia no sólo la ausencia de políticas hídricas integrales, sino el negacionismo de la crisis climática por parte del poder político. Los emprendimientos inmobiliarios de Costa Salguero y Costa Urbana no sólo van a incrementar la frecuencia de inundaciones, sino que van a generar un conjunto de impactos ambientales irreversibles«, sostuvo la especialista.
A las 18 del martes, las organizaciones realizarán una «sentada verde» a las puertas del edificio de IRSA ubicado en Della Paolera al 200. «No podemos permitir que especulen con nuestros espacios, mucho menos cuando sus proyectos no responden a las necesidades básicas de la ciudadanía”, indicó Marina Caivano, coordinadora de la Defensoría de Laburantes. Caivano añadió que «no escucharon el rechazo de les vecines ni ninguna de las luchas que venimos dando. La costanera está en peligro de privatización cuando más se necesitan espacios verdes en una ciudad plagada de cemento».
Tras el plenario del viernes, el bloque del Frente de Todos denunció que el dictamen no cumplió con los tiempos parlamentarios para ser tratado el jueves, ya que no se despachó antes de las 14 horas del viernes como estipula el reglamento. Sin embargo, desde VJ afirman que el plenario se rigió por el decreto que modificó las modalidades legislativas en pandemia, y que ese decreto no establece límites horarios. De este modo, el jueves buscará dar aprobación definitiva al paquete.
Ese día, las organizaciones nucleadas en el movimiento «La Ciudad Somos quienes la habitamos» concentrarán frente a la Legislatura desde las 11, cuando iniciará la sesión. «De avanzar con la votación de estos negocios inmobiliarios, quedará en la historia como la sesión más escandalosa y agresiva de la ciudad de los últimos 30 años«, aseguró Baldiviezo y agregó que «la clase representativa que nos gobierna no está a la altura de los grandes desafíos civilizatorios por delante».
Pero las protestas no terminarán con la sesión del jueves. «Vecinos Unidos de Núñez» convoca ese mismo día a un semaforazo en la esquina de Avenida Cabildo y Ramallo. «Somos autoconvocados a favor de mantener la identidad patrimonial de nuestro barrio y en contra del nuevo Código Urbanístico (CUR) que implica su destrucción y sustitución total por edificios», señalaron los vecinos acerca del CUR de 2018, que permitió elevar las alturas de los edificios en algunas zonas de ese barrio. «De aprobarse el próximo jueves los convenios urbanísticos, será un verdadero escándalo, ya que la participación ciudadana en un 98 % dijo oponerse con argumentos fuertes y claros«, agregaron.
En la sesión del jueves, el oficialismo buscará aprobar también el paquete de convenios para habilitar excepciones de alturas, usos y capacidad constructiva a diversos desarrolladores inmobiliarios. Como resultado habrá 11 nuevas torres en ocho barrios: Caballito, San Cristóbal, Colegiales, Palermo, Belgrano, Almagro, Villa Crespo y Núñez. «Van a destruir la identidad de los barrios y terminar de colapsar la infraestructura de los servicios públicos», advirtió Koutsovitis. Uno de esos convenios habilitaría una torre de 73 metros en Avenida Corrientes y Gallo, en el límite entre Almargro y Balvanera.
«La impronta cultural de Almagro y de la avenida Corrientes es una marca de nuestra ciudad. Por sus librerías nocturnas o sus centros culturales y teatros. Estas torres destruyen este equilibrio cultural y urbano. Rechazamos la construcción del edificio porque no necesitamos torres en Abasto, necesitamos espacios verdes«, dijo a este diario Elisabet Mosconi, de la organización «Proteger Abasto», que el sábado a las 16 horas realizará el «Festival por la Plaza Tita Merello» en el marco de la semana de la resistencia. Los vecinos piden que en el predio destinado a la torre se cree una plaza «para dotar a los barrios de Almagro y Balvanera, los más densamente poblados, de un espacio verde que a la vez homenajeé a una mujer fundamental de nuestra cultura».
María Cristina Corzo, integrante del Consejo Consultivo de la Comuna N°3, detalló que en esa comuna «los pocos espacios que hay son todos cementados. El gobierno de Larreta ha hecho todas plazas cementadas, que aumentan el calor en el verano y donde los niños no pueden ir en ciertas horas. Queremos que el GCBA compre los terrenos baldíos y los destine a espacios verdes«. El Consejo Consultivo realizará el viernes a las 17 una jornada de «concientización por más espacios verdes«, en el cruce de Perón y Ayacucho.
La semana de la resistencia culminará el domingo con una bicicleteada por la Comuna 15, que se iniciará a las 16 horas en avenida Corrientes y Jorge Newbery. Pasará por las plazas 25 de Agosto y Malaver, de Villa Ortúzar, barrio amenazado por el avance inmobiliario, y terminará en el Parque Agronomía. «La idea es visibilizar los conflictos vinculados al avance de la especulación inmobiliaria en la comuna y también expresarnos en contra del manejo arbitrario e inconsulto de la UBA en el predio de Fauba y Veterinarias, categorizado Urbanización Parque, donde está restringiendo las áreas de acceso público”, dijo Rafael Benvenuti, del Movimiento Agronomía Abierta.