8.2.2014
Con una convocatoria que no cubrió la expectativa generada, el gobierno de la ciudad y Subterráneos de Buenos Aires (Sbase) cumplieron con la formalidad de realizar una audiencia pública antes de aumentar la tarifa de subte desde los primeros días de marzo. La lista previa contaba con unos 135 oradores, pero sólo fueron 35 los que expusieron ayer, entre las 11 y las 17, en el Teatro San Martín.
Con la presencia de especialistas en transporte, legisladores, sindicalistas y usuarios, la audiencia se desarrolló entre la postura de los opositores al aumento del boleto y los fundamentos de quienes están a favor del incremento. Pero al ser de carácter no vinculante los testimonios no incidirán en la decisión ya tomada por el gobierno porteño.
"Con este boleto se busca favorecer a aquellos pasajeros frecuentes mediante una modalidad novedosa para el transporte de la ciudad que subsidia a los usuarios que más lo necesitan y no a la empresa", comenzó diciendo Juan Pablo Piccardo, titular de Sbase. Defendió así el sistema de tarifas escalonadas que tendrá un rango de entre $ 2,70 y $ 4,50 -y $ 5 si el pasaje se abona en ventanilla- con descuentos del 20%, 30% o 40% según la frecuencia de uso mensual de cada pasajero.
De esta manera el valor del pasaje será de $ 4,50 por los primeros veinte viajes; $ 3,60 para los siguientes diez; $ 3,15 los diez siguientes, y $ 2,70 a partir del viaje 41.
"Pro ya tiene decidido todo y seguirá adelante, con lo cual ya el aumento se convierte en otra medida injustificable de esta administración", disparó el legislador del Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST), Alejandro Bodart, el primero en hacer uso de los cinco minutos de los que disponía cada orador. "Aumentan el pasaje, pero también aumentaron los subsidios. Eso es lo inexplicable", planteó.
Este punto es uno de los más resistidos entre quienes se oponen al aumento. Durante 2013 Metrovías, la empresa concesionaria del servicio, recibió unos $ 700.000.000 en subsidios. Para 2014 ese monto alcanzará los 1000 millones de pesos, según el presupuesto porteño. Sin embargo, el presidente de la Comisión de Obras y Servicios Públicos, Enzo Pagani, prefirió no entrar en la polémica. "A pesar de todas las contras, la quita de subsidios del gobierno nacional y el avance inflacionario del día a día, nuestra gestión no olvidó en esta propuesta tarifaria los beneficios para la franja social más necesitada", opinó el legislador de Pro mediante un comunicado que hizo llegar a la audiencia.
Su postura se encuentra en la misma línea que la expuesta por Sbase. La readecuación de la tarifa, según explicaron los técnicos, se fijó a raíz del aumento en los costos de explotación del servicio, "producto del creciente proceso inflacionario". En 2013 los costos de operatividad, informaron, crecieron 250 millones de pesos.
Sin embargo, no fue suficiente para conformar a los legisladores presentes. "El gobierno de la ciudad ya aumentó más de un 300% el boleto del subte, a razón de un 150% anual. Sin embargo, el índice de inflación que difunde el mismo gobierno de la ciudad no supera el 24%, y el índice de aumento de los costos que expresa Sbase no supera el 16%", comparó la diputada del Frente para la Victoria María Rachid. "El gobierno no escucha las demandas y de igual manera concretará un aumento innecesario. Así consolida la idea de Pro de ir hacia un subte elitista que excluye a los trabajadores", agregó.
En la misma sintonía se manifestó la legisladora de Confianza Pública Graciela Ocaña. Si bien no estuvo presente en la audiencia, hizo llegar un escrito con el que se sumó al rechazo del aumento. "Los informes operativos del subte ya están inflados y no se toma en cuenta la depreciación del material rodante e infraestructura que sufren los bienes de la ciudad y del cual la empresa concesionaria no se hace cargo", opinó. La ex ministra de Salud de la Nación apuntó a la gestión de Sbase desde que la Ciudad se hizo cargo del subte: "No paran de aumentar el boleto y, sin embargo, el servicio es pésimo, con continuas cancelaciones, falta de seguridad en coches y estaciones, suciedad, escaleras mecánicas que no funcionan por meses, ascensores clausurados y filtraciones".
Por otra parte, los metrodelegados de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y el Premetro (AGTSyP) también se hicieron presentes en el San Martín. "Antes hubo otros aumentos y con éste sumamos casi un 400% desde que Pro se hizo cargo. Recordemos que con el aumento a $ 2,50, unas 200.000 personas dejaron de usar el subte", recordó Roberto Pianelli, titular de la agrupación. Los sindicalistas, que comenzarán a negociar paritarias desde marzo, anticiparon que las conversaciones podrán ser duras, ya que, con el antecedente de un elevado incremento de la tarifa, podrían pedir un aumento más alto que en años anteriores.