Comenzó el juicio a 3 policías por la represión a comunicadores de la RNMA
10.5.2017
Los policías reprimieron la toma de la Sala Alberdi con balas de plomo e hirieron a tres personas, dos de ellos comunicadores populares que integran la Red Nacional de Medios Alternativos. En conferencia de prensa la semana pasada habló su abogada, María del Carmen Verdú, junto a ellos y algunos militantes que acompañaron la resistencia en aquel momento. También estuvieron Marcelo Ramal y Laura Marrone del Frente de Izquierda. De esa convocatoria se realizó una cobertura conjunta entre la Red Nacional de Medios Alternativos junto a Radio Sur. La primera audiencia se está desarrollando esta mañana, luego de una postergación del comienzo del juicio, en Talcahuano 550 a las 9 y media de la mañana. La militancia se convocó a las 8 y el debate oral está a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal Nº7. Los acusados son tres efectivos de la entonces Metropolitana, Pereira de la Rosa, Ledesma y Acosta
¿Por qué pospusieron?
María del Carmen Verdú, abogada Esteban Ruffa y Germán Darío de los Santos, señaló: "Estos policías Metropolitanos ya están disueltos y unificados con la policía de la Ciudad. Aunque siguen siendo la fuerza de este distrito, pertenecen a la misma fuerza política que el gobierno nacional. Nosotros creemos que esta postergación, sin otra explicación que los problemas de agenda del Tribunal, tuvo el tono político de bajarle la trascendencia a esta instancia judicial porque ya es un juicio no a tres integrantes de la policía existente sino de una fuerza que ya no existe". Para la abogada de CORREPI, "esto en términos de que esto es un juicio a la policía de Macri. Como brazo armado del Estado, en ningún caso se trata de individualidades o fuerzas con algún problemita especial de indisciplina o mayor o menor índice de corrupción sino de una política que tiene la tonalidad que le va a imprimir el gobierno de turno de acuerdo a las necesidades", aseguró.
"La Ciudad de Buenos Aires tiene el índice de policía cada cien mil habitantes casi más alto del planeta. Un índice que no tienen las ciudades más militarizadas de Estados Unidos o los países centrales de Europa. No lo tiene México, ni Perú, ni Bolivia ni Colombia", informó Verdú.
El recuerdo de un fotógrafo
Esteban Ruffa, uno de los comunicadores baleados, se presentó: "Soy fotógrafo de la Agencia de Noticias Redacción (ANRed) en la RNMA. El 13 de marzo en horas de la madrugada fuimos heridos con impactos de balas de plomo en las piernas dos periodistas y un manifestante que también recibió impactos en el estómago y la pierna. En mi caso, tengo un plomo incrustado dentro de la tibia. Esa noche hubo una orden de realizar un despliegue represivo brutal sobre la avenida Corrientes y la zona aledaña. Hubo elementos tecnológicos que nosotros nunca habíamos visto, hubo detrás de la orden una intencionalidad de accionar de forma muy agresiva y de despejar", aseguró Ruffa sobre el objetivo policial. "Fuimos perseguidos varias cuadras casi llegando hasta el Obelisco y estábamos tratando de registrar lo que sucedía. Evidentemente había una orden de que periodistas o quienes estuvieran allí registrando fueran especialmente agredidos. La represión estuvo enmarcada en el accionar que vimos en el Parque Indoamericano, en la intrusión violenta en los terrenos del Borda. La Justicia lamentablemente no nos acompañó. Queda un gusto amargo", aseveró.
Germán Darío De Los Santos, intregrante de Dtl!, otro de los baleados, expresó: "Desde la comunicación popular, sabemos que lo que hacemos implica esta tediosa labor de estar en la calle. Hay un contexto de violencia generalizada de parte del Estado, las policías se unifican y están desarrollando planes mucho más acabados. La Policía Federal también tiene sus imputados en esta causa que no hizo nada para impedir los balazos de plomo. Estas son fuerzas que supuestamente estaban enfrentadas en ese momento, la Federal y la Metropolitana. Sólo para aclarar que esas enemistades se terminan cuando hay que reprimir al pueblo", consideró. De Los Santos cerró toda una definición sobre el rol de los comunicadores populares: "Nos sentimos parte del pueblo, por esa razón corrimos el mismo riesgo que quienes estaban ahí manifestándose. Todas las fuerzas, me parece, empiezan a mirar lo que leemos como una avanzada represiva. Ese gobierno que cayó hace cuatro años con la sucesión de represiones, hoy está ahí arriba. Nadie está preparado para recibir una bala de plomo en esas circunstancias, además el compañero se estaba retirando ¿Cómo defenderse de una fuerza que recibe esta clase de órdenes? Lamentablemente van a venir más luchas que impliquen más represión, así que tratemos de prepararnos", advirtió.
El contexto del juicio
Lucía, del Frente Juvenil Hagamos Lo Imposible HLI), que forma parte del espacio de coordinación que conformaron RNMA-CORREPI-HLI para empujar esta causa, explicó: "Nosotros formamos parte de este juicio porque esa noche fuimos parte con otras organizaciones y activistas. Hoy vivimos esta escalada represiva que no sólo tiene que ver con la violencia en las calles sino con relativizar si fueron 30.000 desaparecidos que no es algo menor y sirve para legitimar esa represión en las calles. El Estado no garantiza derechos fundamentales para poder desarrollarse en la vida y el gobierno actual focaliza la represión en la juventud. Pudimos ver como entró la policía al Mariano Acosta para intervenir una protesta estudiantil, también en la Universidad de Jujuy, también reprimen a los docentes que luchan por el salario y aumentan el presupuesto en la Ciudad al armamento policial antidisturbios", señaló sobre el contexto político que se suscita en materia represiva. "Esa represión nos afecta a los jóvenes no solamente en el ámbito educativo sino también en el de nuestro trabajo. Argentina es el país con mayor desempleo juvenil en toda América Latina. La única posibilidad efectiva y rápida de conseguir el empleo es entra a las fuerzas represivas. Así es como ellos lo sugieren, nosotros entendemos que no es un trabajo, sino que es formar parte del aparato represivo del Estado para controlar las luchas de los trabajadores y del pueblo en general", aseguró Lucía. Para la militante, "esto se puede ver en los barrios, en el día a día en las calles, cuando nos detienen arbitrariamente por ser jóvenes, por ser mujeres, también somos víctimas de diferentes problemáticas de violencia de género, de trata de personas, y creemos que es la policía la que no nos recibe en las comisarías y la que tiene que activar la búsqueda cuando una piba no vuelve de la escuela a la casa. Nosotros entendemos que es importante que escuchen este planteo de avanzada represiva. Hay que pensar en quiénes fueron los primeros que salieron a denunciar la represión, Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, para luchar contra la impunidad de ayer y de hoy, también CORREPI", destacó. Refiriéndose a las víctimas de la represión en la Sala Alberdi, remarcó: "Los dos compañeros comunicadores populares que fueron baleados con plomo merecen que estemos acá para denunciar este hecho, seguir defendiendo el valor de la vida y para lograr que estos oficiales vayan presos en el juicio con la lucha popular. Esto es un proyecto político que ahora tiene Larreta así que vamos a encontrarnos en las calles y esa es otra de las cuestiones que nos convoca a este juicio".
¿Por qué es corrupta la policía?
Para Marcelo Ramal del Partido Obrero en el Frente de Izquierda "esta nueva Policía de la Ciudad que se constituyó hace más o menos un año con estos represores, los del Indoamericano, del barrio Papa Francisco, de todos los episodios de violencia institucional que tuvimos en la Ciudad en los últimos años. Ahora a esta Policía la denuncian de coimas y eso da cuenta de otra violencia institucional que es contra los que trabajan en la calle, los vendedores ambulantes, los trapitos que ahora aparecen como parte de esta red de extorsión de naturaleza represiva. Es importante en instancias como esta saber que esta red de corrupción es la retribución o el vuelto chico que recibe el aparato represivo para jugar el papel que vemos acá, el de reprimir las luchas populares, de golpear a los que no tienen acceso a la cultura y a los que en la Ciudad se organizan por vivienda, salud y educación. Es fundamental que entendamos que detrás de eso que aparece como un hecho aislado, quienes están detrás de esto, además de corruptos son represores", definió.
María del Carmen Verdú hizo un aporte: "El jefe de la Tercera, que garantizó el perímetro para que no pudieran acceder más manifestantes a bancar la resistencia a la cana mientras la Metropolitana disparaba, ese comisario estuvo en la foto entre Larreta y Macri cuando se lanzó la policía de la Ciudad. Era un posible primer jefe y no pudo hacerlo por la cantidad de causas que arrastraba de la Policía Federal".
Al apoyo y la solidaridad se sumó Laura Marrone de Izquierda Socialista, actual legisladora por el FIT: "Desde el Frente de Izquierda nosotros presentamos un proyecto para pedir la interpelación del ministro Ocampo por la represión a las mujeres el 8 de marzo y las detenciones del 6. Es evidente que estamos ante una escalada. Felicito por la precisión que han tenido los involucrados en la causa. He participado de la denuncia. Tenemos la memoria que hoy nos levanta una voz inclaudicable por los derechos humanos y contra la reconciliación de la Iglesia. Gracias a CORREPI por todo el apoyo que dan a las causas de quienes viven el gatillo fácil en el sur de nuestra Ciudad particularmente golpeado de nuestras fuerzas represivas", dijo.
Expectativas
Esteban Ruffa, que todavía tiene el casquillo de plomo alojado cerca de su tibia, contó: "Llega el esperado juicio. Pasaron cuatro años, en el medio hubo una postergación, tuvimos que esperar otro año. El Juzgado nos jugó feo en ese sentido. Estamos fortalecidos porque estamos más organizados, más preparados y focalizados en que esto avance. De acá tiene que salir una sentencia bien clara, ejemplificadora que dé por sentado las bases de que la comunicación comunitaria, alternativa y popular cumple una función que no puede ser cercenada ni atacada, que debe ser valorada y que el Estado debe garantizar las condiciones mínimas y las garantías necesarias para que podamos desarrollar nuestra tarea". Para el comunicador, "este ataque no fue inocente, fue bien planificado y estructurado desde los altos mandos de las fuerzas policiales y con una clara decisión política de acompañar nuestra labor y nuestro trabajo cotidiano que acompaña la lucha de distintas organizaciones. En ese momento el poder político y las fuerzas entendieron que había que despejar no sólo la manifestación o a los que desarrollaban actividades para visibilizarse sino también tratar de que los registros sean los mínimos posibles, que no hubiera nadie que pudiera sembrar a través de su lente alguna prueba que incriminara frente al accionar violento de la policía. Estoy nervioso", admitió y explicó por qué "Yo no soy de exponerme, yo expongo. Esto del juicio me pone del otro lado, en evidencia, pero es lo que hay que hacer, es lo que tenemos que impulsar para poder seguir acompañando las luchas para dar lugar a esta construcción que es la comunicación que realizamos desde nuestros medios".