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28 colegios tomados para defender otro tipo de educación pública

14.9.2017

Mariano Pacheco

Dos semanas de tomas de escuelas en CABA. 28 colegios, una reforma que busca imponerse y un reclamo parecido pero distinto a todos los anteriores.

Mañana se cumplen dos semanas desde que el estudiantado del Manuel Belgrano diera el primer paso tomando su escuela. Hoy ya son 25 los establecimientos ocupados por las y los estudiantes que protestan contra la reforma educativa impulsada por la gestión Cambiemos (“Secundaria del Futuro”) y reclaman que se declare la Emergencia en violencia de género en los colegios, además de exigir que el gobierno nacional tome cartas en el asunto para que el joven Santiago Maldonado aparezca con vida, un mes y medio después de su secuestro.

 

Una reforma educativa Pro-mercado

 

Alguna vez Ernesto Guevara dijo: “si el presente es de lucha el futuro es nuestro”. A menos de un mes de que se cumplan los 50 años del asesinato del Che en Bolivia, cientos de jóvenes que estudian en los colegios secundarios de Buenos Aires se han organizado para dar batalla contra lo que entienden es un nuevo intento de los sectores de poder para avanzar sobre la juventud, en este caso, con reformas educativas que priorizarían más su incorporación al mercado laboral como mano de obra precarizada que su formación para el futuro.

Septiembre suele ser un mes movido en colegios de la Ciudad gobernada actualmente por Horacio Rodríguez Larreta. A veces con procesos de organización más silenciosos, con actividades vinculadas al aniversario de la denominada “Noche de los lápices” (el año pasado se realizaron actividades bajo el lema “Septiembre es de lucha, el futuro es nuestro”), y otras –como este año– donde ese tipo de desarrollo menos visible se combina con explosiones de bronca por parte de los pibes y las pibas que hacen que la opinión pública preste atención a lo que dicen, a lo que hacen, aunque las más de las veces sea para condenarlos, bajo pretexto de que, por edad, adolecen del carácter necesario para tomar decisiones de adultos.

“La incorporación de temáticas como la violencia de género o el reclamo por la aparición con vida de Maldonado singularizan el actual conflicto estudiantil, a diferencia de otros reclamos anteriores que también se expresaron en ocupaciones de establecimientos”

Como sea, la cuestión es que el viernes 1 de septiembre la ciudad amaneció con diez colegios tomados. Dos semanas después, los establecimientos ocupados se han multiplicado. En el medio los estudiantes vieron cómo la represión policial a la movilización realizada a Plaza de Mayo por el mes transcurrido desde que la Gendarmería Nacional secuestró a Santiago Maldondo intentaba meter miedo y días después –venciendo el fantasma del terror que circula aun por nuestra sociedad– se movilizaron con tres mil estudiantes por las calles porteñas.

“Lo que está en juego en esta lucha son dos modelos diferentes, antagónicos de entender la educación”, explica Ignacio Mattos. Mattos tiene 18 años, es militante de la agrupación La Simón Bolívar y es una de las caras más visibles de la Coordinadora de Estudiantes de Base (CEB). Mattos cuenta que la iniciativa gubernamental “Secundaria del Futuro” no busca más que reducir contenidos y promover la flexibilización laboral, enlazando la educación pública con las empresas privadas” (durante el último año de cursada del secundario, los estudiantes suplantarían el 50% de su cursada en la escuela a cambio de asistencia a pasantías, que no serían más que un trabajo gratuito en empresas privadas). Y aclara que el objetivo del aprendizaje según lo fija el propio texto de la reforma no está “centrado en el aprendizaje de contenidos, sino en el enfoque por capacidades necesarias para la sociedad del futuro”.

Otro aspecto central del proyecto es el cambio de metodología de enseñanza, lo que puso a gran parte de los gremios docentes en sintonía con los estudiantes en contra del gobierno. Lo que está en juego en esta disputa con los gremios es el rol del docente y el estatuto, que parece querer ser barrido del mapa laboral como otras conquistas, atacadas por el macrismo bajo el pretexto de la “modernización”.

 

Adentro y más allá de las escuelas

 

Las adolescentes que asisten a los colegios secundarios parecen no estar al margen de una realidad de violencia de género presente en nuestra sociedad, en los últimos tiempos mucho más visibilizada, sobre todo a partir del fenómeno de #NiUnaMenos. Si se tiene en cuenta que en Argentina se comete un femicidio cada 18 horas, no resulta tan extraño entonces escuchar de boca de muchas adolescentes su reclamo: que necesitan que el Estado se haga cargo de este tipo de problemáticas, ya que los casos de abusos sexuales han proliferado en los establecimientos escolares. “Las escuelas necesitan de manera urgente crear y aplicar un protocolo contra la violencia de género, que incluya capacitación docentes y asesoramiento a las autoridades, que hoy se muestran totalmente incompetentes ante estas temáticas”, destaca Antonella Giuso, delegada de la CEB.

“Las adolescentes que asisten a los colegios secundarios parecen no estar al margen de una realidad de violencia de género presente en nuestra sociedad”

La incorporación de temáticas como la violencia de género o el reclamo por la aparición con vida de Maldonado singularizan el actual conflicto estudiantil, a diferencia de otros reclamos anteriores que también se expresaron en ocupaciones de establecimientos, como fue en 2013 y 2010 (que incluso se extendieron a otras provincias, como Córdoba). Asimismo, por la ligazón con un modelo laboral sustentado en la flexibilización y la precarización de esta nueva reforma educativa, la lucha emprendida por los estudiantes secundarios suscitó apoyos no solo de algunos gremios docentes, sino también de otros sectores de trabajadores, como los despedidos de Pepsico y la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), que a través de sus secretarías de Derechos Humanos y Mujeres y Diversidad (presididas por Lito Borello y Belén Rozas, respectivamente), se hicieron presentes en el conflicto en estos días. “Acompañamos desde un primer momento la lucha que están llevando a cabo las y los estudiantes secundarios, porque como trabajadoras de la economía popular repudiamos la reforma educativa que pone a los pibes y a las pibas como mano de obra barata para un modelo de país que acumula riqueza para unos pocos a costa del pueblo entero”, sostuvo Rozas, en diálogo con este medio. Además, la referente social agregó que desde la mencionada secretaría vienen exigiendo también la declaración de la emergencia en violencia de género. “Es fundamental que la juventud se ponga de pie contra este gobierno y que todos los sectores combativos apoyemos y concluyamos nuestras luchas en pos de sumar fuerza”, remató. Borello, por su parte, destacó la importancia de la unidad de los distintos sectores populares que se unen para resistir las políticas neoliberales del actual gobierno y para construir otro mundo posible. “Durante estos días estuvimos recorriendo las escuelas y seguimos atentamente este conflicto, preocupados por la soberbia y la sordera del gobierno ante los reclamos del movimiento estudiantil”.

Por otra parte, desde la CEB destacaron que hoy en día la escuela funciona como un lugar de contención y no de formación del pensamiento crítico. “La situación socioeconómica de la juventud también pone de manifiesto los problemas de fondo: el 20% de los y las jóvenes que egresa de la escuela esté desempleado, el 60% de los empleados están en negro, más de 750.000 jóvenes argentinos no trabajan pero tampoco estudian y 80.000 dejan sus estudios para ir a trabajar”, destacaron a través de un comunicado.

 

Pedagogía del miedo

 

A pocos días de cumplirse un nuevo aniversario de “La noche de los lápices”, el raid represivo de septiembre de 1976 que secuestró, torturó y desapareció a jóvenes estudiantes secundarios de la ciudad de La Plata (historia ampliamente conocida por la investigación periodística realizada por María Seoane y Héctor Ruiz Núñez, publicada en formato libro en 1986 y el estreno cinematográfico del film de Héctor Olivera el mismo año), la gestión Cambiemos en la ciudad de Buenos Aires puso en circulación un “Instructivo” para que las autoridades de los colegios denuncien penalmente las medidas de fuerzas. Y si bien desde el Ministerio de Educación de la Ciudad negaron la autenticidad de dicho instructivo, lo cierto es que fue distribuido en los establecimientos escolares por medio de una cuenta de e-mail oficial del Ministerio (dem@bue.edu.ar) y fue utilizado por los directivos de los colegios Mariano Acosta, Julio Cortázar y Manuel Belgrano para presentar denuncias penales contra los estudiantes que protagonizan las tomas de escuelas. Incluso dos de ellas citaron el instructivo en sus denuncias. Y más allá de declaraciones periodísticas, el Ministerio no ha hecho circular ninguna versión oficial que desmienta la circulación de dicho instructivo por canales oficiales de comunicación del Estado.

Más allá de la valentía de los jóvenes y el asesoramiento jurídico que puedan tener para el caso de parte de abogados defensores de los derechos humanos, lo cierto es que la pedagogía del miedo comienza a circular ante este tipo de casos. Una pedagogía que surte más efecto en los padres que en los menores de edad que protagonizan estas protestas.

“Más allá de la valentía de los jóvenes y el asesoramiento jurídico que puedan tener para el caso de parte de abogados defensores de los derechos humanos, lo cierto es que la pedagogía del miedo comienza a circular ante este tipo de casos”

Al parecer, los funcionarios de Educación de la ciudad parecen olvidar que aún en sistemas democráticos restringidos como en los que vivimos, el derecho a la protesta es madre de otros derechos consagrados en la Constitución Nacional. Por supuesto, también ameritaría un debate el hecho de si las protestas no son también formativas de un pensamiento crítico entre la juventud e incluso, un acto pedagógico tanto para estudiantes como para docentes. Por algo en su memento desde la Asociación de Trabajadores de la Educación de Neuquén (ATEN), junto con el rostro del maestro Carlos Fuentealba (asesinado en una protesta el 4 de abril de 2007) levantaron la consigna “Maestro luchando también está enseñando”.

Este cronista tuvo la oportunidad, hace unos días, de hacerse presente en el colegio Manuel Belgrano. Y ver allí cómo un grupo de chicas y muchachos (cuyas edades oscilaban entre los 14 y los 18 años) se hacían cargo de la reproducción material (y simbólica) de sus vidas: desde cocinar, lavar los platos, limpiar los baños y acomodar los espacios de reunión hasta garantizar el cuidado de sí, registrando quiénes estaban en el establecimiento, impidiendo que se consumieran drogas o alcohol, o haciendo guardias en la puerta de ingreso para no permitir que nadie ajeno a la protesta ingresara al lugar. Esto sin mencionar el profundo ejercicio educativo y democrático que se los veía realizar, tanto con el desarrollo de talleres temáticos (muchos coordinados por docentes que se acercaban a la protesta a solidarizarse) así como también en los modos de resolver los desafíos presentados, mediante asambleas en donde de manera horizontal todos los presentes podían opinar y contribuir a una toma de decisiones colectivas y elegir a sus delegados de escuela para ser la voz ante los demás colegios reunidos en la Coordinadora de Estudiantes de Base.

 Al cierre de esta edición los estudiantes se habían congregado frente al Ministerio de Educación de la Ciudad. La ministra Soledad Acuña había prometido recibirlos, pero luego se negó a hacerlo. Sí entraron representantes sindicales, entre ellos Amanda Martín, secretaria adjunta de ADEMYS, quien destacó que el gobierno parece “muy decido a avanzar con la reforma”. “Confirmaron el tema de las pasantías y el cambio de las evaluaciones por los créditos”, comentó. Para la dirigente gremial, tanto por sus argumentos como por sus propuestas pedagógicas, la iniciativa gubernamental no puede ser avalada por la comunidad educativa. Martín contó que la ministra se quedó sólo un rato en la reunión y que luego los funcionarios presentes no pudieron dar respuestas a las preguntas que vienen planteando los estudiantes en este proceso de lucha, que intentaron ser judicializadas por el Ministerio. “Las tomas de escuelas son una herramienta de lucha totalmente legítima gestada históricamente por el movimiento estudiantil y nosotros no sólo las apoyamos sino que estamos ahí junto a los estudiantes, promocionando la gestación de un gran movimiento en defensa de la educación pública”, remató la dirigente sindical, quien confirmó que este viernes los estudiantes otra vez estarán en las calles y que desde ADEMYS están impulsando una “gran marcha educativa” para la semana que viene.

 

COLEGIOS TOMADOS

 

1. Escuela de Bellas Artes “Manuel Belgrano” (Villafañe Wenceslao 1342 – Barracas)

2. Normal 1 “Roque Sáenz Peña” (Cordoba 1951 – Recoleta)

3. ESC N8 (Carlos E. Zuberbuhler 1800 – Belgrano)

4. Escuela de Bellas Artes “Rogelio Yrurtia” (Av. Juan Bautista Alberdi 4754 – Villa Luro)

5. Técnica Nº 33 Plumerillo (Av. Int. Francisco Rabanal 1549 – Nueva Pompeya)

6. Comercial 7 DE 10 “Manuel Belgrano” (Av. Monroe 3061 – Belgrano)

7. Escuela Superior de Comercio “Carlos Pellegrini” (Marcelo T de Alvear 1850- Recoleta)

8. Escuela Normal Superior en Lenguas Vivas N°2 “Mariano Acosta” (Gral. Urquiza 277-Balvanera)

9. Colegio Nacional de Buenos Aires (Bolívar 263-Monserrat)

10. Escuela Julio Cortázar N1 DE 12 (Bogotá 2759)

11. Escuela Osvaldo Pugliese (Padilla 1051

12. IES en Lenguas Vivas “Juan Ramón Fernández” (Carlos Pellegrini 1515)

13. Escuela de Música “Juan Pedro Esnaola” (Crisólogo Larralde 5085)

14. Escuela Técnica “Fernando Fader” (La Porteña 54)

15. Escuela de Cerámica “Fernando Arranz” (Alejandro Margariños Cervantes 5068)

16. Escuela “Federico García Lorca” (Av. Chorroarín 305)

17. Escuela “Rodolfo Walsh” (Argerich 5651)

18. Escuela “Nicolás Avellaneda” (El Salvador 5528)

19. Normal N°6 (Aráoz 2408)

20. Escuela de Danzas N°1 “Nelly Ramicone” (Fonrouge 711)

21. IES “Juan B. Justo” (Lascano 3840)

22. Escuela “Sofía Broken Spangenberg” (Juncal 3251)

23. Escuela “María Claudia Falcone” (Malabia 2148)

24. Pueyrredón

25. Escuela de Teatro Niní Marshall (Pieres 258 – Liniers)

26. Normal 5

27. Nacional 17

28. Che Guevara

Secundaria del futuro: “En quinto año planea un 50% de la cursada trabajando gratuitamente en una empresa”

13.9.2017

Por Juan Manuel Ciucci

Entrevista a Abril Kravacek, estudiante secundaria de la Escuela Técnica Fernando Fader, que participa de las tomas de colegios en la Ciudad de Buenos Aires contra la reforma que intenta imponer el macrismo. 

 

APU: Se están tomando numerosos colegios en la Ciudad, ¿cuál es el motivo?

Abril Kravacek: El motivo principal de la toma de colegios de CABA es por la reforma educativa que quiere aplicar el macrismo llamada "secundaria del futuro". Se le critica a esta reforma -entre otros puntos- que además de no contemplar a las orientaciones particulares (como las escuelas técnicas o artísticas) en quinto año se planea tener un 50% de la cursada trabajando de forma gratuita y obligatoriamente en una empresa privada. Exigimos la participación de la comunidad educativa, la postergación de su aplicación (prevista para el 2018), la capacitación a nuestros docentes y tener los insumos en cuanto a la infraestructura y los materiales necesarios para ser aplicada. Seguimos reclamando la real aplicación de la ley de educación sexual integral que la "secundaria del futuro" no contempla.

 

APU: ¿En qué colegio estás? ¿Cómo vienen llevando adelante la toma?

AK: Estoy en la Escuela Técnica Fernando Fader y decidimos en asambleas tomar la institución el viernes 8 de septiembre. Para llevar a cabo esta medida nos estamos organizando por comisiones (de seguridad, limpieza, actividades, etc.) en las que todo el estudiantado se hace cargo de aportar activamente a la convivencia dentro del colegio. Contamos con el apoyo de muchos de nuestros padres y de los docentes. Tenemos también un grupo de estudiantes que van a hablar y comunicar el conflicto a otros colegios que no están organizados, para poder informar y que se unan a la lucha.

 

APU: ¿Qué respuesta han tenido del Gobierno porteño?

AK: La única respuesta del Gobierno es amedrentar y hostigar a los colegios que están discutiendo y votando las medidas. En cuanto a los colegios tomados se contradice el Ministerio entre sí mandando un instructivo "antitoma" que nos denuncia y nos quiere expulsar y deslegitimizar nuestra medida; también se encargan de mentir en los medios de comunicación diciendo por ejemplo que esta reforma ya se estaba discutiendo con nosotrxs lxs estudiantes. Nosotrxs queremos una reunión con Acuña (ministra de Educación de la Ciudad, María Soledad Acuña) que sea informativa en cuanto a lo que ya se tiene planificado y también resolutiva en cuanto a nuestros reclamos.

 

APU: ¿Cuáles son las medidas a seguir?

AK: Fomentar la participación de las más de 150 escuelas de la Capital es lo principal, que todxs se enteren de esta reforma y sepan que el macrismo no quiere apostar a la educación pública, atacándonos años tras año. Marchar este viernes en conmemoración a la Noche de los Lápices, informar y tomar más colegios. En definitiva nuestra respuesta a las medidas a seguir es la lucha y la organización.

Texto completo del documento leído al finalizar la marcha de repudio a Netanyahu en Buenos Aires

13.9.2017

El Comité Argentino de Solidaridad con el Pueblo Palestino, y todas las organizaciones que lo componen, hace público su más absoluto repudio a la presencia en territorio argentino de Benjamín Netanyahu, Primer Ministro del Estado de Israel, abiertamente genocida y violadora del Derecho Internacional, responsable de crímenes de guerra, que ha cobrado la vida de miles de seres humanos, desplazado a millones y que mantiene secuestrados en terribles condiciones a más de seis mil palestinos en cárceles israelíes, sin ningún tipo de garantía legal, entre otros crímenes de lesa humanidad

Exigimos a nuestro gobierno interrumpir de manera inmediata todo tipo de relación con esta entidad ocupante dada la obligación de todo estado democrático de defender los Derechos Humanos y no mantener relaciones con un gobierno que practica la violación sistemática de los mismos, de aislarlo diplomática, económica y políticamente, a fin de que cesen sus prácticas segregacionistas, colonialistas, antidemocráticas y de apartheid.

Tanto durante la Nakba (la expulsión de palestinos de su tierra en 1948) como durante la Naksa (la ocupación de la totalidad restante del territorio en 1967), los israelíes han recurrido al terror (como en las masacres de Deir Yassin o Ein al Zaytoun) para que la población palestina abandonara sus tierras.

Hoy, casi 2.000.000 de palestinos viven en la Franja de Gaza, territorio de 262 km2 de superficie y una de las zonas más densamente pobladas de la tierra, constituida en la mayor cárcel a cielo abierta del mundo. El bloqueo al que es sometida, no permite en la práctica la circulación ni de personas ni de productos imprescindibles para la construcción, la salud, la alimentación, es decir, la vida misma. Gaza está hoy al borde de una gigantesca catástrofe humanitaria, ya que se encuentra sometida no sólo a las incursiones militares para llevarse prisioneros, sino a constantes ataques aéreos y bombardeos de distinta intensidad y magnitud La operación Margen Protector de 2014 dejó más de 2300 muertos, entre ellos 555 niños y niñas, más de 10.000 heridos, 475.000 desplazados y la masiva destrucción de infraestructura y viviendas.

En el territorio de Cisjordania, por otra parte, viven 2.600.000 palestinos, 900.000 de ellos en precarios campos de refugiados de casi 70 años de antigüedad en los que, violando los Acuerdos de Oslo, el ejército israelí penetra generalmente de noche para asesinar o secuestrar a palestinos al igual que hace en otras ciudades.

Toda Palestina está cruzada por un muro y un entramado de rutas cuyo uso está segregado para palestinos o israelíes. Los puntos de control militar (check points) impiden la libre circulación, allí los humillan, dividen a las familias y convierten en una odisea llegar al lugar de trabajo, cultivar los campos, concurrir a las escuelas y a los hospitales. Numerosas mujeres palestinas embarazadas han perdido a sus hijos esperando en estos puestos.

En la zona que está bajo total control israelí, se produce la destrucción de viviendas, la instalación de colonias y el robo sistemático del agua.

En Jerusalén Oriental viven unos 250.000 palestinos. En 1980 Israel se anexionó la ciudad. El Consejo de Seguridad de la ONU, declaró que dicho acto ilegal y unilateral «constituye una violación del derecho internacional» y «supone un serio obstáculo para el logro de una paz completa, justa y duradera». Sin embargo, esto no ha constituido un impedimento para que Israel continúe con el desarrollo de una Gran Jerusalén cada vez más judaizada. Los incidentes de este año 2017, se relacionan con esta política. Estos palestinos, que en muchos casos pertenecen a familias que han vivido por siglos en Jerusalén, tienen status de inmigrantes residentes temporarios, y son hostigados cotidianamente.

Por otra parte, los refugiados palestinos en Medio Oriente, más de cuatro millones, al igual que los emigrantes, tienen absoluta prohibición de regresar al territorio donde ellos o sus familias han nacido.

Quinientos mil israelíes son colonos en tierras palestinas de Jerusalén y Cisjordania. Las leyes internacionales y en particular la 4ª Convención de Ginebra, prohíben expresamente transferir población civil a territorios militarmente ocupados, de manera que todas las colonias son ilegales.

Los palestinos que permanecieron en 1948 en lo que hoy es el Estado de Israel, 1.600.000, es decir el 20% de la población de ese estado, poseen ciudadanía israelí, pero son allí considerados y tratados como ciudadanos de segunda clase y son numerosas las leyes que les otorgan menores derechos que a los ciudadanos israelíes judíos.

Cuando los palestinos ejercen su legítimo derecho a la resistencia ante la ocupación, o un soldado israelí sostiene que lo han hecho -cualquiera sea la forma- como un niño que tira una piedra, sufren ejecuciones extrajudiciales o detenciones arbitrarias. En los últimos 10 años más de 5100 palestinos fueron asesinados por fuerzas de seguridad israelíes, y más de 25 por civiles israelíes. Entre ellos, más de 1100 niños y más de 400 mujeres.

Desde 1967, más de 750.000 ciudadanos palestinos han sido detenidos. Entre ellos, 15.000 mujeres y decenas de miles de niños. Cerca del 40% de la población masculina ha pasado por las cárceles israelíes. Estas cárceles, salvo una, violando las leyes internacionales, se encuentran en territorio israelí, lo que complica seriamente las visitas familiares.

En general, las detenciones son sorpresivas y nocturnas, para evitar la reacción de los vecinos. No se informa, por tiempos que pueden ser prolongados, el destino del detenido. Las torturas son prácticas habituales, convalidadas por el Tribunal Supremo israelí. Los niños son interrogados sin la presencia de sus padres. La detención administrativa es una modalidad que vuelve aún más arbitraria la represión: el fiscal puede informar en secreto, sin conocimiento del acusado y de su defensor, todos o parte de los motivos de la detención sólo al juez, impidiendo de esta forma toda posibilidad de defensa. En principio, la prisión administrativa no puede prolongarse más de seis meses, pero puede renovarse indefinidamente. Hay prisioneros que han pasado ocho años en prisión bajo la excusa de detención administrativa.

En julio de este año había 6.128 palestinos prisioneros, 450 de ellos en prisión administrativa, 320 niños, 62 mujeres.

Junto con la opresión permanente sobre el pueblo palestino y la ocupación de su territorio, Israel agrede a otros países árabes de la región, participa soterradamente en el conflicto de la República Árabe Siria, país en el que donde mantiene ocupadas ilegalmente las alturas del Golán desde el año 1967 y que lucha denodadamente por expulsar a los grupos terroristas de su territorio, así como las Granjas de Shebaa en la vecina República del Líbano, también agredido por el flagelo del terrorismo. Toda esta política injerencista del Estado de Israel se ve agravada por el paraguas de impunidad que le otorga ser el principal aliado de los Estados Unidos de Norteamérica, potencia que pretende hegemonizar la política internacional a través de sus constantes prácticas imperialistas.

Benjamín Netanyahu ha participado activamente, como militar y desde distintas funciones en el gobierno de Israel, en la ejecución de este genocidio, y en los últimos ocho años, en calidad de Primer Ministro, es el mayor responsable de los crímenes cometidos contra el pueblo palestino.

La invitación a Benjamín Netanyahu convierte al gobierno nacional en cómplice de un genocida y su presencia en suelo argentino es un insulto a una república que debe ser defensora de la legalidad internacional y de los atributos más preciados de la humanidad, como son el derecho de los pueblos a vivir en paz, sin ocupación ni agresiones colonialistas.

Pero las víctimas de Israel no son sólo los palestinos. Israel es un proveedor mundial de armas, elementos y capacitación para la represión. Fue proveedor de nuestra dictadura, y de gran parte de las dictaduras de América Latina. Garantiza siempre que lo que provee “ha sido probado”, sí, probado contra el pueblo palestino. Nuestro país ya está comprando estos productos, y la visita de Netanyahu viene a fortalecer los vínculos en este sentido. ¡Los argentinos no queremos represión y no queremos armas israelíes para la represión!

¡Fuera Netanyahu de la Argentina!

¡Viva Palestina Libre!                                        

Buenos Aires, septiembre de 2012

Estudiantes elevarán un petitorio contra la reforma educativa y decidirán si continúan las tomas

13.9.2017

Integrantes de 23 escuelas públicas de la Ciudad de Buenos Aires lo anunciaron tras reunirse con la Defensoría del Pueblo, que mediará en el encuentro con el Ministerio de Educación.

 Estudiantes elevarán un petitorio contra la reforma educativa y decidirán si continúan las tomas

Integrantes de 23 escuelas públicas de la Ciudad de Buenos Aires lo anunciaron tras reunirse con la Defensoría del Pueblo, que mediará en el encuentro con el Ministerio de Educación.

 Estudiantes y padres de 23 escuelas públicas de la Ciudad de Buenos Aires elevarán un petitorio al Ministerio de Educación porteño en rechazo a la implementación de la reforma educativa, anunciaron este martes tras reunirse con la Defensoría del Pueblo, que mediará en el encuentro, mientras que los alumnos afirmaron que decidirán mañana si continúan las tomas.

Después de la reunión con el defensor Alejandro Amor, los estudiantes elaboraron un temario para presentar ante la ministra Soledad Acuña en el que piden que “se desista de la implementación del proyecto”, que se dé de baja el instructivo sobre cómo proceder en casos de tomas de establecimientos educativos, que se aplique la Ley de Educación Sexual y se establezca un protocolo para casos de violencia de género.

“Estamos planteando que se baje la reforma educativa porque no nos consultaron a nosotros a la hora de implementarla y va en contra de nuestros derechos”, aseguró Juan, estudiante del Mariano Acosta.

“Pedimos que no implementen ahora la reforma, creemos que es inconsulta y no consensuada, tiene puntos conflictivos que necesitan ser tratados”, aseveró la alumna Victoria, del Carlos Pellegrini.

Roberto, padre de un alumno de la Escuela de Música Juan Pedro Esnaola, aseveró que la reforma propuesta por el Ministerio de Educación porteño “no queda clara, no está explicitada”.

Hoy se presentó un amparo por parte del asesor tutelar de la Cámara de Apelaciones, Gustavo Daniel Moreno, y de primera instancia, Mabel López Oliva para que se suspenda la aplicación del instructivo sobre cómo proceder en casos de tomas de establecimientos educativos de la Ciudad de Buenos Aires, procedimiento que la cartera de Soledad Acuña negó utilizar.

El otro punto que los estudiantes quieren llevar a la discusión con funcionarios porteños es “la implementación real de la ley de Educación Sexual”, reconoció la estudiante Victoria, a la vez que pedirán por un protocolo para la prevención e intervención en casos de violencia de género y discriminación.

Tras la reunión en la Defensoría del Pueblo, los estudiantes no confirmaron si se levantarán las medidas de fuerza en los 16 colegios que continúan tomados desde el 29 de agosto, las cuales la ministra Acuña denunció ayer que eran motivadas por “intereses políticos en juego”.

“La gran parte de las tomas van a durar hasta el viernes y otras se van a suspender”, aseguró Manuel, estudiante de la Escuela Lenguas Vivas.

La reunión entre la comunidad educativa y el ministerio de Educación porteño tendría lugar la semana que viene, aunque no está definido el encuentro, ya que desde la cartera de Acuña se había pedido el cese de las medidas de fuerza para restablecer las conversaciones.

En tanto, la Defensoría del Pueblo va a “mediar” entre las partes para acercar posiciones.
“Creemos en el diálogo, es la única forma de resolver las cosas, para que comience una nueva etapa hay que escucharse”, aseguró Amor.

Docentes villeros pidieron que se declare la emergencia educativa

12.9.2017

En el marco del Día del Maestro, los docentes de los barrios más postergados de la Ciudad de Buenos Aires hicieron una actividad en el Obelisco y pidieron que se declare la emergencia educativa.

Docentes de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), de la agrupación La Poderosa y del colectivo Maestras y Maestros Villeros dictaron ayer una clase pública frente al Obelisco para reivindicar la tarea que llevan adelante en zonas vulnerables de la ciudad y reclamar la urgente declaración de la emergencia educativa, al conmemorarse el Día del Maestro.

El temario de la clase pública, incluyó un homenaje al maestro Carlos Fuentealba, asesinado el 4 de abril de 2007 en medio de una movilización del gremio docente neuquino.

Desde UTE indicaron que “a casi dos años de la asunción de Mauricio Macri como presidente, y ante la falta de diálogo con el actual gobierno” se llevó a cabo clase pública por “el futuro de la educación, los jóvenes estudiantes y todos los educadores a los que, cada día, se les hace más dificultoso brindar una enseñanza de calidad”.

“A partir del trabajo en clase y en el día a día, las maestras y maestros villeros exigen, se declare la emergencia alimentaria, la emergencia educativa, la emergencia laboral y la emergencia en la protección, frente a la violencia institucional”, indicaron los organizadores.

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